Un dia para la democracia.

Hoy es es día de la gente que sale, libreta en mano, cámara en mano, grabadora en mano, a buscar información. Hoy es el día de gente que, en las redacciones, en las emisoras, o en el ciberespacio garantiza el derecho fundamental a saber lo que el poder quiere ocultar.

No hablo hoy de quienes olvidan a sus audiencias para representar a la fuente, al funcionario, al empresario, al cliente.

No me refiero a quienes venden la pluma o los micrófonos y fingen independencia. No incluyo en estas líneas a esos que, aliados al poder, sacrifican verdades por privilegios.

Hoy quiero hablar de quienes luchan, en los pueblos y en las más encumbradas oficinas de las metrópolis, porcontar las historias que realmente importan, de esos que pelean con la fuerza de David frente a Goliat para que se sepa lo que los poderes públicos y privados quieren ocultar.

Ellos, ellas son héroes y heroínas de una democracia cansada de escándalos y decepciones. Ellos, ellas reviven la fe en que será posible una sociedad de ciudadanos y ciudadanas y no de gente demasiado concentrada en sobrevivir como para exigir.

Porque, ¿para qué sirve el periodismo sino para mostrar lo que, muchas veces, es desagradable de ver? ¿Para qué sino para abrir espacios a quienes tradicionalmente son acallados? Todos y todas los ciudadanos tenemos voz, pero no siempre los espacios para manifestar puntos de vista que discrepen del discurso del establishment.

Para eso, entre otras misiones, estamos los y las periodistas. Lo otro no es periodismo. Aunque quiera parecerlo.

Nuestro día nos encuentra en un mundo obstáculos: intimidaciones, amenazas, asesinatos, cierres de medios, despidos, bajos salarios. Que no sean éstaa razones para bajar la guardia. La democracia nos necesita.

Fuente:
www.mariasoldevila.blogspot.com